La Abuelita de las Nieves
















Pues no hubo forma de convencerla, no señor. Ella repitió una y mil veces que ya no tenía edad como para andar de la ceca a la meca, huyendo de las miserias, de las desdichas y de las calamidades. Qué a ella nadie conseguiría sacarla de allí y, por lo tanto, ahí se plantaba, frente a la chimenea, con su fiel y  batallador"Canelo" y que, a estas alturas de la "pilícula" ya no temía ni a nada ni a nadie pues, tras su ausencia, nada peor podría pasarle nunca jamás.
Además -reflexionaba en voz bien alta para que oyéramos todos su letanía -, cuando echáramos de menos el calor del hogar y  tuviéramos la necesidad de regresar de por esos mundos de dios -cosa que sin duda haríamos- ella ahí seguiría, atizando la lumbre y combatiendo el hambre con la parsimonia de quien remueve  eternamente un puchero para que, al regreso, encontráramos la casa caldeadita y el plato caliente ..."como había sido toda la vida y como seguiría siendo cuando llegaran los hielos, siempre tan pertinaces, capaces de congelar hasta las propias almas".

The granny of the Snows
Well there was no way to convince her, no sir. She repeated a thousand times that he was not old enough to go from pillar to post, avoiding the miseries, misfortunes and calamities. What nobody get her out of there and, therefore, there was planted in front of the fireplace, with his loyal and feisty "Canelo" and that, at this stage of the "pilícula" and feared neither anything or anyone because, after his absence, nothing worse could happen ever again.
Besides, pondered loudly for us to hear all his litany - when echáramos under the warmth of home and we had the need to return to those worlds of god-thing-we would certainly follow her there, stoking the fire and fighting Hunger with the parsimony eternally who removes a pot so that when you return, we found the house caldeadita and hot plate ... "as he had been a lifetime and still be like when they got the ice, always so stubborn, capable freeze until very souls "

Comentarios

  1. No sé qué me gusta más, si tus fotos o el texto que compartes.
    Es un placer pasar por tu casa. Por donde volveré, con tu permiso.

    Un abrazo.

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  2. unos días me haces reír...


    ...

    ... otros me haces llorar.

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  3. Aunque no te lo creas, espero, con ilusión y ganas, la notificación de alguna nueva entrada tuya.
    Un abrazo

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  4. ¡Hola Aldaba! Muchas gracias por entrar y por quedarte. Como podrás imaginar yo estoy encantado de tener por aquí a una magnífica escritora como tú.

    Mi querida Greta...espero que los de reír sean muchos más que los otros :)

    Pero Kano, qué cosas me dices. Por supuesto que te creo; nos conocemos desde hace muchos años y, aunque nos separen muchos kilómetros, la afinidad no la perdemos.

    Besos para todos...

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  5. Decididamente nos hacemos mayores y nos vamos preparando para esa vejez que ya intuimos cercana. Una preparación que llega a traves de los recuerdos o empatías de los que ya pasaron por lo que será nuestro devenir.
    Como siempre, todo magistral.
    Un abrazo amigo

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  6. Querido Cormo, ya sabes que a nosotros no nos van a poder atar los telómeros como si fueran chorizos, así que contra los años no vmos a poder luchar, pero sí contra la vejez.
    Y yo no pienso ser viejo nunca.
    Abrazo de gol -que dice mi estimado Ariel-.

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